Otro curso ha llegado a su fin, marcando otro tic-tac en mi reloj biológico. Ya llevo 16 años como profesor en la Universidad; y como siempre, este curso también han habido retos, nuevas experiencias, desarrollos docentes y de investigación. Es necesario un merecido descanso. Para recobrar la energía, para aclarar las ideas, para desintoxicarse de la crisis, los recortes, las privatizaciones y la corrupción política. En definitiva para mantener la sintonía del cuerpo y la mente con la Naturaleza. Una ocasión más que aprovecharé para enriquecerme conociendo otras culturas, pensamientos, sabores, personas, paisajes, sonidos… en definitiva, me podréis encontrar en alguno de estos sitios…

Desconecto durante el mes de agosto, pero a mi vuelta prometo contestar a todos los mensajes que puedan quedar pendientes. Mientras tanto, si queréis podéis leer alguno de los artículos que he escrito en el blog este curso:

Hasta pronto!