Un deportivo Chevrolet Tahoe tuneado capaz de maniobrar por sí mismo fue el ganador de la carrera de coches robots, denominada ‘The Grand Challenge’. Lo hizo después de un viaje sin ayuda de seres humanos, durante seis horas y 60 millas (100 kilómetros aproximadamente, esto es una velocidad media de unos 17 km/h).
Se trata de la tercera carrera de este tipo que se celebra desde 2004. El objetivo de la carrera era que los vehículos terminaran sin abolladuras, siguieran al pie de la letra el código de circulación de California y finalizaran en un máximo de seis horas un recorrido predeterminado. ‘Boss’ y los otros vehículos condujeron por una ciudad simulada, creada en una base en desuso de la aviación estadounidense en Victorville, en el desierto de California.
Todos tuvieron que desplazarse en carreteras y calles de uno y dos carriles, superar cruces, evitar edificios y lograr aparcar. Así como los otros 10 vehículos, Boss tuvo que ‘esquivar’ también 30 coches conducidos por pilotos profesionales.
Para evitar accidentes graves, un vehículo con piloto humano seguía al ‘robótico’ y lo vigilaba constantemente. En caso de descontrol el hombre podía presionar un botón de emergencia que paraba instantáneamente toda acción del robot. Esto no impidió que un camión volquete de tres metros de alto y dos y medio de ancho conducido por ordenador se empotrara contra un edificio. “Parecía que estaba aparcado y de repente se subió al bordillo y dio contra el edificio”, afirmó Juan, un espectador.
«Ayer fue un día histórico», dijo Tony Tether, director de la agencia de investigación del Departamento de Defensa estadounidense, después de la entrega de premios a los ganadores.
El vehículo de la Carnegie Mellon University de Pittsburgh (‘Boss’) ganó el premio de dos millones de dólares en la carrera patrocinada por la agencia de investigación del [[Departamento de Defensa de Estados Unidos]] o [[Darpa]].
Esta agencia quiere que tarde o temprano, los robots conduzcan vehículos de suministro militares.
El vehículo, patrocinado principalmente por [[General Motors]], terminó por delante del Volkswagen de la Universidad de Stanford (‘Junior’), que en 2005 ya ganó la carrera, y del vehículo de la Virginia Tech, denominado ‘Victor Tango’.
En ella, sólo seis vehículos, que alcanzaron una velocidad máxima de unos 40 kilómetros por hora, consiguieron finalizar.
Los vehículos utilizaron una combinación de navegación por satélite, cámaras, radar, lásers y sistemas de [[inteligencia artificial]] asistidos por ordenador. Todos estos sistemas permiten al vehículos saber dónde está y a dónde se debe ir, para después dejar la conducción en ‘manos’ de un ‘sistema de conducción inteligente’.
Las universidades esperan que estas tecnologías ayuden a reducir los accidentes y a mejorar la conducción en un futuro.
Llamarme ‘observador’, pero me ha llamado la atención que 2 de los finalistas (el primero y el segundo puesto) han sido patrocinados, entre otros, por [[Google]]. ¡Qué ojo tienen estos chicos de Google que apuestan a ‘caballo ganador’!. Curioso también, que en cambio no hayan patrocinado al equipo de su ‘alma mater’ el MIT.